29 de abril de 2007

tienes que perder

No te he contado que siempre intento alejarme de las multitudes, escapar de cuerpos geométricos que tienen demasiados vértices y ángulos obtusos. Por eso necesito respirar hondo, pensar dos veces cada movimiento como si esto fuera una partida de ajedrez eterna. Nunca me queda claro el reparto de papeles, y tiendo a confundir al protagonista con ese actor secundario sin frase que simplemente aparece en escena en el momento más inoportuno. Así que trátame como material frágil, decide bien en qué categoría encajo, porque llevo mil viajes con el billete equivocado encima, y uno más podría hacer volcar el barco. No me hagas mucho caso ni me tomes tan en serio, porque puede que esto sólo sea emocionante visto desde fuera, aquí dentro cuesta encontrar las palabras necesarias y hay demasiado en juego como para saber por quién apostar. Recuerda que a veces es un error tratar de sacar ventaja en situaciones desfavorables, y nadie se detiene en un cruce para preguntar cómo se sale de él.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Esto ya es el manual del indeciso perfecto, aburre.

Elena -sin h- dijo...

(Escuchando cien días)

Quizás no encajar en algo es la mejor manera de disfrutarlo, aunque se te acaben infectando las aristas bajo la piel, porque una vez estás dentro, sólo tienes un camino posible. Apuesta siempre al 13 y el camino aparecerá ante tu izquierda (gajes profesionales :P).

Y de aburrir nada, sólo hay que saber leer(te) en los acentos. Y no tomarte demasiado en serio, claro ;)

Suerte esta tarde! (no pude evitarlo! :$)

Anónimo dijo...

El dolor del otro nunca aburre, por eso se alimenta día a día, para tener con que mantenerse entretenido y no tener que ver el propio, lo ajeno es siempre tan tentador.
Pero cuando lo que uno tiene frente a los ojos puede ser un espejo en el que asomarse, pero es imposible porque han empañado cada centímetro de él con intereses mezquinos que nunca se preguntan por la necesidad del necesitado, ay, que aburrimiento, que angustia, que hartazgo, que cansancio, que , que, que...
...Que se vayan al carajo que joder!
Y vos podrías ya dejar de esconderte, al menos de mi, el resto ni me va ni me viene, sabes dónde estoy, material frágil y ¿Yo qué soy?.

Natxo sin parentesis dijo...

Si hay algo que perder indica que vale la pena.


Nunca dejaré de preguntarme porque la gente se empeña en leer todos los textos como si fueran biográficos.

Anónimo dijo...

¿No será porque cada UNO tiene plena libertad de leer verdad o mentira (¿Qué es ficción?) en las palabras propias o ajenas ?
Eso es una pregunta.

Natxo sin parentesis dijo...

De acuerdo. Pero si es así, por qué pedir explicaciones sobre algo que ni siquiera se sabe si es real? Por qué enojarse cuando no se hallan explicaciones?
Es cuanto menos, inútil.

Anónimo dijo...

¿Podría resultarte de verdadera utilidad que yo te conteste esas preguntas cuando las has cerrado con una calificación que ni siquiera has releído en ti mismo?
Yo, simplemente, no tengo nada mejor que hacer y respondo por mi exclusiva cuenta, eso es todo.

unsologato dijo...

ronroneo y después saludo y antes ronroneo y después saltitos en cualquier tejado que te quede cerca...